domingo, 30 de junio de 2013

El budismo y el ser humano




Al budismo le da igual que seas cristiano, judío o musulmán. Lo que le importa es que seas un ser humano. No le interesa como estés en la sociedad, sino como estés por dentro y aunque cada persona sea un mundo, todos los seres humanos están condicionados por los mismos sentimientos y sensaciones: el amor, el odio, la ira, la tristeza, el deseo, el miedo, la incertidumbre, la alegría...

Todos podemos estar sujetos a esos estados, y eso cual sea nuestra educación, nuestro rango social, o nuestra cultura. Son atributos del genero humano y nunca hay que olvidar que somos ante-todo un Ser Humano, antes de ser rey o mendigo, ladrón o policía, monja o prostituta.

Es tan natural y tan simple, y sin embargo nos olvidamos tan fácilmente...

La sociedad nos ha etiquetado, ha hecho casillas para identificarnos externamente (y no interiormente) y así nos hemos ido alejando del ser humano, ya no podemos ver al otro tal como es, es decir igual a nosotros, por todas esas cualificaciones y definiciones.

Todo el mundo intenta ser algo por fuera, sea por la profesión, el prestigio, la religión, el reconocimiento, todos queremos ocupar un lugar en las miles de "carpetas" diseñadas por la sociedad.

¿Pero quienes somos realmente?....

   Acuérdate que aunque tu jefe te caiga mal,  no entiendas a tu padre,  no te lleves bien con tu suegra o  tu vecino te sea indiferente, ambos habéis experimentado el deseo, la rabia, el amor, el odio, la alegría. Todos los humanos tienen en común "lo de experimentar"....

   Acuérdate del niño en ti, que disfrutaba jugando con cada uno, sin temor y sin juicio, observador y curioso, haciendo de su presente su energía sin pensar en el mañana.....

   Acuérdate, el Niño que esta en ti también es tu Guía......


Cecile B